Para 2 B de Senillosa.

Los Hermanos Graco y el comienzo de la revolución política y social.

En Roma aumentaba el número de esclavos, los patricios tenían cada vez más tierras y cada vez había menos propietarios y, finalmente, los pueblos aliados, tenían dificultades en ser reconocidos como ciudadanos romanos.

Hubo dentro de los patricios, pensadores que fueron reformadores radicales, que pretendían iniciar una lucha de clases, entre patricios y plebeyos, conducidos estos últimos por los tribunos. El objetivo era lograr que el Senado tuviera menos poder en las decisiones políticas.

Tiberio Sempronio Graco fue uno de los patricios reformadores. Se presentó como candidato a Tribuno de la Plebe, obteniendo el cargo en 133. Tenía varios proyectos que quiso poner en funcionamiento. El primero era mejorar la capacidad combativa del ejército, mejorando la situación del campesinado romano y aumentando el número de concesión de tierras a los ciudadanos romanos, tuvieran o no derecho a ello. También tenía un proyecto agrario, que consistía en dar a cada ciudadano no más de 500 iugera de tierra pública, máximo que podía ser llevado a 1000 si el ciudadano tenía dos hijos mayores. El resto de la tierra pública que se hallaba en manos de los grandes señores debía ser redistribuida. Por supuesto los patricios no querían que les quitaran tierras. Cuando el proyecto podía ser ley, Tiberio Graco fue asesinado.

En el año 124, su hermano, Cayo Graco se presenta como Tribuno. Su plan de reformas era más ambicioso y preciso que el de su hermano. En primer lugar, trataba de lograr que fuera la Asamblea popular y no el Senado, la institución que decidiera los asuntos importantes en Roma. Era ni más ni menos que establecer una democracia. Presentó además una nueva ley agraria, que implicaba confiscar tierras públicas a los ricos y otorgarlas a aquellos que no tuvieran. En tercer lugar, tenía la intención de extender la ciudadanía romana a sus aliados itálicos. Y finalmente modificaba las condiciones del servicio militar en el ejército para los ciudadanos y los aliados. Sancionó además la ley del trigo, por la cual el Estado estaba obligado a vender trigo a los ciudadanos de la capital a precios más bajos que los del mercado. Finalmente comenzó a construir cierto número de nuevos caminos en Italia, tanto para fines militares como económicos (comerciales).

Graco quiso presentarse para ser reelegido como Tribuno, pero el Senado presentó su propio candidato (Livio Druso) y además inició una campaña para desprestigiar y perseguir a Cayo. El Senado inició una revuelta que finalizó con 3250 partidarios de Cayo muertos, él incluido.

Pero la muerte de los Graco no fue en vano. Sus seguidores crearon el partido popular. Este enfrentamiento entre los optimates y los populares, creará el comienzo de las guerras civiles.