domingo, 4 de diciembre de 2011

Despedida promoción 2011 CPEM 87

Todos los años los profesores participamos de este acto. Todos los años. ¿Y saben qué? No nos aburrimos. Cada fiesta es única como lo es para ustedes. Como lo son Ustedes. No es que se recibe la promoción 2011. Se reciben juan, Lucila, Ulises, Daniela, Pablo, Norma, Ludmila, Chelo, Pato, Juan José,  Giuli… cada uno con su trayectoria escolar  y cada uno con su historia de vida personal. Historias de vida que a lo largo de estos cuatro años también cambiaron. No son los mismos que cuando ingresaron por primera vez a clase.
Es que cuando la educación atraviesa nuestras vidas nos cambia. Nos cambia la manera de mirar, de actuar, de reflexionar y de pensar. Nos cambia los objetivos. Buscamos metas más lejanas, nos proponemos ideales o sueños que ni se nos hubieran ocurrido antes de entrar a la escuela.
Sin percibirlo han logrado un desarrollo moral, transitando desde la heteronomía, desde hacer las cosas porque siempre se hicieron así, donde las normas se reciben de afuera, donde nos imponen las cosas como si no hubiera otra opción más que aceptarlas, a la autonomía de discutir y justificar las normas, de saber por qué hacen esto y no aquello. Y de poder cambiarlas si es necesario. Ya no nos podemos hacer los giles y decir “yo no sabía”. Ya no podemos resignarnos y aceptar en forma pasiva lo que sucede o lo que nos sucede. Y tampoco podemos resolver los conflictos de cualquier manera. Ahora debemos hacerlo con argumentos, respetando las opiniones diferentes, construyendo consensos a partir del diálogo. Cuando uno va a la escuela la violencia ya no es aceptable ni como opción ni como solución.
Espero que hayamos logrado formar ciudadanos capaces de vivir con la diversidad, sin sentir a los otros como una amenaza por ser distintos.  La escuela consciente o no, es transmisora de valores.  Ahora poseen nuevas herramientas que les sirven para nuevos aprendizajes y también para la resolución de situaciones de vida cotidiana.
Transitar por la escuela nos cambia también de clase social. Porque la clase social a la que pertenecemos no depende exclusivamente de nuestro nivel económico. Sino también de nuestro nivel educativo. De la cantidad de herramientas que disponemos para resolver problemas, para enfrentar situaciones, para mejorar nuestro nivel de vida, para darnos mejores respuestas a las preguntas de la vida.
Y por eso también nos compromete con la sociedad en que vivimos. La sociedad nos formó gratuitamente para ser mejores, pero también para que nuestro aporte dentro de ella sea de mejor calidad. La sociedad invierte en nosotros para que mejorando nosotros seamos mejores todos. Cuando uno conoce, ya no puede hacerse el distraído. Conocer nos hace más responsables con el futuro propio y de toda la comunidad.
Me gustaría que la escuela por la que pasaron haya sido una escuela de la pregunta. Porque una sociedad democrática pregunta. Nada pregunta quien considera que tiene todas las respuestas correctas. Preguntar es atreverse a saber lo que todavía no se sabe, lo que todavía no tiene respuesta. En el preguntar zozobra la certeza, el mundo pierde pie, su orden tambalea,  y la intensidad de lo polémico y lo conflictivo vuelve a cobrar preponderancia. La escuela y la sociedad de la pregunta es democrática, porque reconoce a todos la capacidad de argumentar, el derecho a comunicarse, a exponer los propios argumentos a confrontar ideales de vida. No es malo debatir, confrontar ideas, cuestionarlas…
Si hemos logrado algo de todo lo dicho, Nos podemos ir todos con una sonrisa.
Por lo demás, les deseo de todo corazón que sean felices, en nombre de todos los profesores les digo que tienen las puertas de la escuela abiertas para cuando nos necesiten, siempre los estaremos esperando para saludarlos, abrazarlos y saber de sus vidas porque somos parte de ellas y porque no nos será indiferente saber de sus éxitos o de sus penas. Hablo de penas y no de fracasos, porque  el fracaso sucede cuando ya no se puede hacer más nada. Y Uds. tienen una vida por delante.
Los queremos muchos, mucha suerte.

viernes, 14 de octubre de 2011

ley de medios. Educación Cívica 3ro. C Centenario

Alumnos: este es un resumen. De todos modos léanlo para el miércoles, ya que vamos a ver dos videos relacionados con esto. De este texto haremos un práctico también. 
Cariños.
1) Democratización y universalización

La regulación de los servicios de comunicación audiovisual en todo el ámbito territorial de la Argentina y el desarrollo de mecanismos destinados a la promoción, desconcentración y fomento de la competencia tienen como fines el abaratamiento, la democratización y la universalización de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación.

2) Servicios de interés público

Se considera a la comunicación audiovisual en cualquiera de sus soportes una actividad social de interés público, de carácter esencial para el desarrollo sociocultural de la población, por el que se exterioriza el derecho humano inalienable de expresar, recibir, difundir e investigar informaciones, ideas y opiniones sin ningún tipo de censura.

3) Órganos colegiados

Se crea la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual, un órgano autárquico y descentralizado, que tiene como función la aplicación, la interpretación y el cumplimiento de la ley. Su directorio estará conformado por un presidente y un director designados por el Poder Ejecutivo, tres directores propuestos por la Comisión Bicameral de Promoción y Seguimiento de la Comunicación Audiovisual, correspondiendo uno a la primera minoría, uno a la segunda minoría y uno a la tercera minoría parlamentarias; y dos directores a propuesta del Consejo Federal de Comunicación Audiovisual. Existirá también un Consejo Federal cuyos miembros provinciales van a representar a los prestadores privados, a las emisoras universitarias, a los medios públicos y a los trabajadores de prensa.

4) Defensoría del Público de Servicios de Comunicación Audiovisual

Se crea la Defensoría del Público de Servicios de Comunicación Audiovisual, un organismo encargado de recibir y canalizar las consultas, reclamos y denuncias del público de la radio y la televisión. Será designado por resolución conjunta de los presidentes de ambas Cámaras.

5) Abono Social

Los servicios de televisión por cable deberán disponer de un abono social. Esta disposición atiende a que, en ciertos sitios, el prestador de servicio de radiodifusión por suscripción a título oneroso, es el único servicio que existe para mirar televisión. Se busca que todos los habitantes tengan acceso a los servicios de radiodifusión y comunicación audiovisual.  

6) Desmonopolización

Con el fin de impedir la formación de monopolios y oligopolios, el proyecto de ley pone límites a la concentración, fijando topes a la cantidad de licencias y por tipo de medio. Un mismo concesionario sólo podrá tener una licencia de servicio de comunicación audiovisual sobre soporte satelital; hasta 10 señales sonoras, de televisión abierta o cable (la ley actual permite que una persona sea dueña de 24) y hasta 24 licencias de radiodifusión por suscripción. A ningún operador se le permitirá que dé servicios a más del 35 por ciento del total de la población del país o de los abonados, en el caso que corresponda. Por otra parte, quien maneje un canal de televisión abierta no podrá ser dueño de una empresa de distribución de TV por cable en la misma localidad, y viceversa. También se impide que las compañías telefónicas brinden servicios de televisión por cable.

7) Titulares de las licencias

El proyecto establece que para ser titular de una licencia se ponderarán criterios de idoneidad y de arraigo en la actividad. Excluirá a quienes hayan sido funcionarios jerárquicos de gobiernos de facto, atendiendo a la importancia de los medios en la construcción del Estado de Derecho y la vida democrática. Cuando el prestador del servicio fuera una sociedad comercial deberá tener un capital social de origen nacional, permitiéndose la participación de capital extranjero sólo de hasta un máximo del 30% del capital accionario.  

8) Participación de cooperativas

A diferencia de la ley vigente, se permite la participación de cooperativas, siempre y cuando se garantice una porción del mercado a un competidor.

9) Plazo de las licencias

La operación de los medios audiovisuales se hará, según la propuesta, por sistema de licencias y las mismas durarán diez años (hoy son por 15) y se podrán prorrogar por diez años más, previa realización de audiencias públicas. Quienes hayan obtenido una renovación o prórroga, no podrán solicitar una nueva extensión de plazo por ningún título.

Al mismo tiempo esas licencias serán controladas cada dos años, para evitar que con la incorporación de nuevas tecnologías -la digitalización- un licenciatario multiplique sus señales, generando un nuevo modo de concentración.

10) Más contenidos nacionales

Los servicios de televisión abierta deberán emitir un mínimo del 60% de producción nacional; con un mínimo del 30% de producción propia que incluya informativos locales.

Los servicios de televisión por cable no satelital deberán incluir como mínimo una señal de producción local propia. También deberán incluir en su grilla de señales originadas en países del MERCOSUR y en países latinoamericanos.

Las radios privadas deberán emitir un mínimo de 50% de producción propia, que incluya noticieros o informativos locales. El 30% de la música emitida deberá ser de origen nacional. Quedarán eximidas emisoras dedicadas a colectividades extranjeras o temáticas.

11) Igualdad de oportunidades

Las emisiones de televisión abierta y la señal local de producción propia de los sistemas de cable deben incorporar medios de comunicación visual adicional en el que se utilice subtitulado oculto (closed caption), lenguaje de señas y audio descripción, para la recepción por personas con discapacidades sensoriales, adultos mayores y otras personas que puedan tener dificultades para acceder a los contenidos.  

12) Acceso universal para la transmisión de eventos deportivos

Se garantiza el derecho al acceso universal -a través de los servicios de comunicación audiovisual- a los contenidos informativos de interés relevante y de acontecimientos deportivos de encuentros futbolísticos u otro género o especialidad. Los partidos de fútbol y otros encuentros olímpicos que sean de interés para la Argentina se transmitirán por la televisión abierta de acceso libre.

13) Publicidad

Se regula el tiempo de emisión de publicidad con el objetivo de proteger al público contra un exceso de interrupciones publicitarias y promover un modelo de radio y televisión de calidad.  

14) Nuevas tecnologías y servicios

A diferencia de la ley anterior, la propuesta contempla el potencial impacto que provocaría la incorporación de nuevas tecnologías y servicios que no se encuentren operativas en la actualidad. Se procura un desarrollo armónico atendiendo a los espacios futuros a crearse por vía de los procesos de digitalización, en los que la pluralidad debe ser garantizada.

15) Radio y televisión estatales más participativos

Se crea Radio y Televisión Argentina Sociedad del Estado, que reunirá a todos los servicios de radiodifusión sonora y televisiva que en este momento se encuentra bajo la órbita del Estado Nacional. El Directorio estará integrado por siete miembros, con un presidente y un director designado por el Poder Ejecutivo y tres directores propuestos por la Comisión Bicameral de Promoción y Seguimiento de la Comunicación Audiovisual, uno por la primera minoría, otro por la segunda y otro por la tercera. Y se crea un Consejo Consultivo Honorario de los Medios Públicos que garantiza mayor participación social.  

16) Medios Municipales y Provinciales

Se reserva para cada Estado Provincial y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires una frecuencia AM, una FM y una de televisión abierta. Cada Estado Municipal tendrá reservada una frecuencia FM.

17) Más voces de la sociedad civil

Se reserva el 33% de las localizaciones radioeléctricas planificadas, en todas las bandas de radiodifusión sonora y de televisión terrestres, en todas las áreas de cobertura, para las organizaciones sin fines de lucro. Además, los pueblos originarios serán autorizados para la instalación y funcionamiento de radios AM y FM y así como de señales de televisión abierta.

18) Medios Universitarios y Educativos

Las Universidades Nacionales podrán ser titulares de autorizaciones para la instalación y explotación de servicios de radiodifusión. Deberán dedicar espacios relevantes de su programación a la divulgación del conocimiento científico, a la extensión universitaria y a la creación y experimentación artística y cultural.

19) Televisión e infancia

Se prevé la creación de un Fondo de Fomento Concursable para la Producción de Programas de Televisión de Calidad para Niños, Niñas y Adolescentes que tendrá como objetivo desarrollar estrategias que permitan producir más televisión y radio de carácter educativo, cultural e infantil.  

20) Cine nacional

Se establece, por primera vez, la fijación de una cuota de pantalla. Los canales de televisión abierta y de cable deberán exhibir de forma obligatoria y en estreno televisivo ocho películas nacionales por año. La ley actual no contempla ninguna normativa de promoción del cine nacional.

domingo, 28 de agosto de 2011

El primer golpe militar en la Argentina.


El segundo gobierno de Yrigoyen y el golpe del 6 de setiembre de 1930.

Así como la corrección electoral y la neutralidad internacional fue el tema del radicalismo en la primera presidencia, la “batalla del petróleo” lo sería en la segunda. Si en 1916 había ganado por 370.000 votos contra 340.000, en 1928 lo había hecho por 800.000 contra 400.000. Claras diferencias. El pueblo estaba con él.

“Estamos en la alternativa de elegir entre el monopolio de la Estándar  o la Anglo-Persian y el monopolio del Estado, que es monopolio del pueblo argentino, ya que quien monopoliza es el Estado republicano democrático que nosotros estamos realizando en la hora presente”. Diego Luis Molinari.

“Por razones de soberanía que podrían correr riesgo en el futuro, debemos tener la serenidad y la firmeza de alejar este peligro (el intervencionismo extranjero), respetando a los extranjeros el derecho que las leyes les acuerden, pero trazando una raya a los errores o a las imprevisiones del pasado” Jorge Raúl Rodríguez.

“El dólar imperialista se viene con su ley: la del más fuerte; sus ingenieros y sus cateadores ocultan siempre la tropa de desembarco”. Raúl Oyhanarte.

El bloque conservador, los radicales antipersonalistas y la mayoría del bloque socialista, defendieron las empresas privadas y el capital extranjero. El proyecto de nacionalización quedó encarpetado en el Congreso y nunca más se volvió a tocar. Incluso un acuerdo con la Yuyamtorg (petrolera de la Unión Soviética) para importar petróleo más barato que a EEUU y a Inglaterra, a cambio de toros de raza y de taninos, quedó en el escritorio de Yrigoyen el día que fue derrocado, para que siguiéramos comerciando con nuestros antiguos “amos” británicos.

“No creo incurrir en parcialidad si digo que correspondió a nuestro pequeño grupo el honor de haber despertado la conciencia del país haciendo perceptible a las masas, por una campaña de energía sin igual, el ultraje que representaba para la nación continuar con ese abominable desgobierno en ese desquicio administrativo absoluto, en la abyección de un régimen de caudillismo inferior e inculto…” Federico Pinedo

Desde enero de 1930 los Grales. José Félix Uriburu y Agustín P. Justo se reunían para preparar el golpe. No estaban de acuerdo en los fines de la revolución. Uriburu considera que el ejército debe sacarlo a Yrigoyen reemplazándolo por un gobierno o directorio militar hasta que se resolviese la forma definitiva. Justo opinaba que debía coordinarse la acción con los partidos opositores, para luego de derrocarlo llamar a elecciones. Uriburu no cree en los partidos políticos ni en el sistema constitucional.

Los radicales también van a apoyar el golpe pensando que el caudillo está viejo. Y además aspiraban a que al renunciar el Presidente, iba a quedar el Vicepresidente, por lo que el radicalismo iba a seguir en el poder. Se equivocaron, comenzando por el mismo Vice (Elpidio Martínez) quien al encontrarse frente a Uriburu y ver que éste le exigía la renuncia expresó: ¡Me han traicionado!

viernes, 19 de agosto de 2011

Alvear visto por Felix Luna. Sus inicios y un resumen de su participación política.


Alvear: Algunas definiciones de Félix Luna sobre su vida anterior a la participación política.[1]

Estaba enamorado de una cantante lírica: Regina Pacini. Por ser actriz, ya era mal vista por la familia de Marcelo. No se trataba de un breve capricho. Ocho años duró la persecución. Ocho años por Europa siguiendo tras las huellas de su amada, cubriendo de flores su itinerario, oyendo embelesado sus arias, recibiendo de vuelta sus regalos. Ocho años liquidando su fortuna en este interminable deambular, con breves intervalos para viajar a Buenos Aires y arreglar un poco sus cosas. ¿La política? Bah, por ahora no había nada que hacer. Roca era inconmovible. La revolución que tejía Hipólito obsesivamente no estallaba nunca. ¿Sus intereses? Ya se ocuparía el tío Diego o el hermano Ángel: y si estaba muy apurado, alguna de sus maravillosas tías lo habría de remediar… Una vez casado se fue a vivir a París en 1906, hasta que el Radicalismo triunfa, con la nueva ley electora de Sáenz Peña en 1912. Lo habían incluido como diputado y esa fue su primera actuación política. Tenía 44 años.

Alvear: Algunas definiciones de Félix Luna sobre su gobierno y sus consecuencias.[2]

EI fracaso de Alvear y su gente fue más injustificable, porque la oportunidad que tuvieron fue única para forjar un gran movimiento popular de contenido emancipador.
Cuando Alvear asumió la jefatura había desaparecido prácticamente la influencia de Yrigoyen, que moriría poco después. No existía, por lo tanto, un peligro de rivalidades de líderes ni pesaba sobre el partido la tutoría del gran viejo. El radicalismo se había acostumbrado demasiado a la dirección de Yrigoyen y descansaba confiadamente sobre ella. Todo lo que Yrigoyen hacía estaba bien. Por primera vez en su historia, hacia 1931/33, la Unión Cívica Radical tenía que valerse por sí sola. Alvear pudo aprovechar esta coyuntura para formar un partido con criterio propio, con una doctrina que no durmiera en un folleto de propaganda sino viva y agresivamente presente en la masa partidaria. Un partido que superara el ciclo de los grandes jefes para pasar a un nuevo estadio político: el de la toma de conciencia de los grandes problemas nacionales por la base humana que lo formaba. No solamente no hizo nada por obtener tal progreso, sino que se deja halagar y jefaturizar, haciendo retroceder en este aspecto la evolución cívica del partido. Pero aun esto hubiera sido perdonable a cambio de haber logrado la puesta en forma de una fuerza que podía convertirse en un medio eficiente de liberación.

Pero tampoco esto hizo. En cambio, pudo haberla frustrado definitivamente, imprimiéndole un sesgo blando y claudicante. Alvear no supo resolver el problema de superar el fraude electoral, ni adoptó la posición que correspondía frente a los gobiernos creados en violación de la ley, frente a la acción corruptora de los imperialismos, y frente a la entrega del país. A su muerte, el partido de Yrigoyen estaba reducido a una empresa electoral vacía de grandes ideales, incapaz de un gran gesto de renunciamiento 0 de enfrentamientos con sentido heroico,  que se manejaba a través de mecanismos ajenos al pueblo radical.
La culpa no fue solamente suya, sino también del elenco que lo rodeó, del medio ambiente de la época y de la sutil acción de los intereses empeñados en minimizar la gravedad del momento que vivía el país. La sinceridad y el desinterés con que personalmente actuó son indiscutibles: pero esto no basta para absolver a Alvear, pues los hombres públicos no se justifican por lo que íntimamente hayan pensado, sino por los que objetivamente hayan hecho o dejado de hacer. EI fallo, pues, no tiene que ser necesariamente condenatorio. Si su muerte y la revolución del43 no hubieran ocurrido cuando ocurrieron, quizás el radicalismo habría terminado en las más extrañas aberraciones políticas. Esto no llegó a suceder porque Alvear no tiñó con su modalidad todo el radicalismo, sino una parte. Pero alcanzo a moldear un gran sector partidario con características indelebles. EI radicalismo se salvó porque estaba alimentado en profundidad por vertientes populares que  lo nutrían desde su origen y que sirvieron de anticuerpos contra el estilo que Alvear personificaba. El pueblo radical permaneció como en espera de las palabras y los signos con los que Yrigoyen había hecho de esa fuerza primitiva, instintiva, desbordada, un factor decisivo de realizaciones populares. Debieron pasar varios años antes que las tendencias internas del propio radicalismo entroncadas en la línea yrigoyeneana lograran reenquiciar la entidad formal partidaria en su gran trayectoria histórica.



[1] Luna, Félix; Alvear; Pág. 39; Editorial Sudamericana, Barcelona, 1999.
[2] Luna, Félix; Alvear; Pág. 358-363; Editorial Sudamericana, Barcelona, 1999.

La Presidencia de Marcelo Torcuato de Alvear.


Presidencia de Alvear.[1]

Durante su presidencia actuó como si tuviera miedo de seguir los caminos trazados por su predecesor (Yrigoyen).
“En realidad su origen familiar [provenía de una familia oligárquica], su formación liberal, su experiencia europea, su temperamento cómodo, su horror por las tareas pesadas, lo inducían a olvidarse del mensaje que le dejaba Yrigoyen. Eso, y el círculo que lo rodeaba, ferozmente antiyirigoyenista. En su gestión gubernativa, se advierte el gran defecto personal de Alvear: la carencia de profundidad para ver las cosas. Advirtió en el gobierno de Yrigoyen solo lo formal, lo superficial: le horrorizó que su antecesor no concurriera al Congreso a leer su mensaje anual, que los ministros no contestaran oralmente las interpelaciones, que se intervinieran provincias por motivos políticos. Vio los pequeños errores, las minúsculas transgresiones, pero no alcanzó a percibir las grandes perspectivas que se habrían debajo de las rarezas y tanteos de su antecesor.
Desde un punto de vista estrictamente legal, el gobierno de Yrigoyen fue criticable. Decretó intervenciones pasando por sobre la autoridad del congreso, dispuso gastos por mero acuerdo de ministros. Pero esas intervenciones se enderezaban a restablecer la soberanía popular arrebatada por las oligarquías locales, esos gestos estaban afirmando las bases de la independencia económica (como el caso de la compra del Bahía Blanca o la iniciación del ferrocarril de Huaytiquina). Frente a la tenaz oposición de sus adversarios, frente a la miopía burocrática de los indiferentes, Yrigoyen estaba haciendo historia.
En cambio, el gobierno de Alvear, se ajustó estrictamente a las normas legales y reglamentarias. Pero no hizo nada que continuara o desarrollara las grandes líneas de la emancipación nacional. Se contentó con ser legalista, como si la erección de un estado de derecho fuera el desiderátum de su gobierno; como si no fuera necesario tocar nada de lo establecido. Como si el orden vigente en el país estuviera sustentado sobre bases de justicia y no fueran el resultado de largos años de explotación y falacia.
Pecó por omisión. Por no hacer. Aunque también hubo hechos concretos que significaban posiciones opuestas a las adoptadas por Yrigoyen. Así ocurrió, por ejemplo, con la política internacional. Alvear insistió varias veces ante el Congreso para que la Argentina retornara a la Liga de las Naciones; y en la VI conferencia Panamericana realizada en La Habana, dejó en descubierto al delegado Pueyrredón, que quería plantear una posición definida frente a la guerra aduanera y a la intromisión político militar de Estados Unidos en los países americanos. Permitió la derogación de la ley de jubilaciones de empleados y obreros de empresas particulares, avanzado instrumento de previsión que hubiera adelantado en muchos años el régimen de amparo de los trabajadores. Aunque YPF no fue molestada en su desarrollo, Alvear no hizo nada para lograr la nacionalización del petróleo, que sufrió durante su presidencia una accidentada peripecia. La ley de represión de los “trusts” quedó prácticamente anulada por no reglamentarse su aplicación. La Reforma Universitaria fue saboteada enviando el Poder Ejecutivo intervenciones antirreformistas a las Universidades de La Plata y el Litoral, y sancionándose estatutos que la retaceaban en la de Buenos Aires. Algunas obras públicas que tenían importancia dentro de una línea de liberación nacional quedaron paralizadas. Tal, el ferrocarril de Huaytiquina, la vía férrea de patagones a Nahuel Huapi, las de Puerto Madryn a Esquel y Jacobacci. Lo mismo ocurrió con la restitución al Estado de tierra fiscal indebidamente poseída por intrusos. En materia institucional Alvear rectificó las concepciones yrigoyenianas, afirmando su carácter de gobierno “de orden común” y modificando el sentido de su política en lo referente a intervenciones federales.
Fue un retroceso en esa voluntad de emancipación que encarnaba el radicalismo. Si Alvear hubiera provenido de otro partido, su gestión merecería el aplauso. Siendo, como era, radical (y de los viejos tiempos) es necesario concluir que no interpretó los antiguos anhelos populares por una Argentina transformadas sobre bases de justicia. Porque la presidencia de Alvear puede mensurarse en cifras de exportación o índices de crecimiento, pero el gobierno de Yrigoyen debe medirse por la dimensión de sus sueños”.
Sus errores dieron base política a la división del partido y así se creó un ala de “derecha” en el radicalismo.
Los sucesos de la presidencia de Alvear apenas alcanzan la categoría de crónica. Caben en memorias ministeriales, no en páginas de historia.   



[1] Luna, Félix; Alvear; pág. 71-74; Editorial Sudamericana, Barcelona, 1999.